Resumen
- La respuesta eléctrica de las plantas a los estímulos ambientales se puede medir y relacionar cuantitativamente con la intensidad de varias fuentes estimulantes, como la temperatura, la radiación solar, el contenido de agua en el suelo, las tasas de evapotranspiración, el flujo de savia y los ciclos dendrométricos. Estas relaciones pueden usarse para evaluar la influencia de diferentes situaciones ambientales en la disponibilidad de agua del suelo para las plantas, definida como una condición de estado estable entre el flujo transpirativo de la hoja y el flujo de agua del suelo hacia las raíces de la planta. Un flujo de agua en el suelo restringido debido a la sequedad del suelo puede desencadenar un estrés hídrico en las plantas, si la demanda de evaporación atmosférica es alta, lo que provoca el cierre parcial de los estomas como una respuesta fisiológica para evitar la deshidratación de la planta; Plantas estresadas y estresadas por agua manifiestan una respuesta eléctrica diferencial.