Algunas consideraciones para el desarrollo de la labranza de conservación- Chapter uri icon

Resumen

  • La labranza cero o siembra directa debe hacerse en forma gradual en la finca, preferiblemente debe comenzarse con la labranza reducida, con el uso de implementos de labranza vertical (cinceles vibratorios o rígidos). En suelos con problemas de degradación y compactación; es indispensable el uso de cinceles y abonos verdes, hasta la recuperación total del suelo. La siembra directa permite sembrar cualquiera de los cultivos anuales. Los sistemas de rotación recomendados para la región del Piedemonte llanero, terrazas altas y en la Altillanura plana, son: arroz-soya, maíz-soya, arroz-algodón y maíz-algodón, al igual que la rotación con sorgo en el segundo semestre. Este sistema de siembra directa requiere de cuidadosa observación, el desconocimiento o descuido de cualquier factor conduce inexorablemente al fracaso. La siembra directa exige más esfuerzo mental que ffsico, es decir, se trabaja 70% menos en el campo, pero se requiere mayor atención y profesionalización del productor y del asistente técnico. Este sistema es exigente en la regulación y calibración de los implementos y equipos agrícolas.

Fecha de publicación

  • 2004