Resumen
- La citricultura comercial en el piedemonte del Meta se inició en la década de 1960 en el municipio de Villavicencio y en la región del Ariari. En los años siguientes continuó creciendo en forma permanente, llegando a tener cerca de 2.000 ha en 1993 y más de 6.000 ha en la actualidad. En este periodo se incorporaron avances tecnológicos en el manejo del cultivo, en variedades, patrones, en las labores de cosecha, poscosecha y comercialización y se contó con el apoyo de entidades del sector público para su consolidación.